El estudio de la casa es un lugar especial. Decide para qué lo quieres y adecúalo para sacarle el máximo provecho.
El estudio se ha convertido en un espacio de almacenamiento temporal en muchas casas; lo que no sabemos dónde guardar, va directo a esta habitación. Papeles, facturas, juguetes de los niños, textos de la universidad, discos de acetato, CD, artefactos electrónicos viejos, la chaqueta con la que acabamos de llegar y usaremos más tarde, el bolso, el maletín, a veces incluso hasta los zapatos. Es el cuarto más pequeño de la casa y, también a veces, el más congestionado. Si decidiste aprovechar al máximo este espacio y optimizar el uso de esos metros cuadrados, atento a estas recomendaciones.
Define un uso específico
El cuarto de estudio puede ser multifuncional. Sin embargo, no debe utilizarse para todo a la vez. Es indispensable definir para qué se va a usar; de esta manera se podrá adecuar la decoración, y organizar y disponer el espacio según sus dimensiones:
Te podria interesar: Las tres formas de hacer más espacio en tu garaje
Paso a paso
1. Revisa y descarta: lo primero es limpiar la habitación, revisar los objetos que tenemos allí y decidir cuáles queremos mantener —en el estudio, en la casa, en el depósito o en una minibodega—, cuáles hay que desechar —es común encontrar en estas limpiezas marcadores sin tinta, pegante seco, facturas de hace dos o tres años— y cuáles podemos donar —libros, artefactos electrónicos, etc.—.
2. Cada cosa en su lugar: sin importar el uso que has decidido darle a la habitación, es fundamental que los objetos que vas a tener allí estén ordenados y a la mano. Para ello es muy útil comprar cajas o cestas organizadoras y etiquetarlas. También hay organizadores especiales para gavetas: son ideales para establecer un patrón para objetos pequeños.
Puedes tener gavetas temáticas o por categorías, una para objetos de papelería como tijeras, marcadores, lápices de colores, clips, cosedora, cinta plástica. O, si es un cuarto de acondicionamiento físico, toallas de mano, velas aromáticas, inciensos, etc. Lo mejor es comenzar por los elementos más grandes y terminar con los pequeños.
3. Escoge el mobiliario adecuado: todas las habitaciones mencionadas al principio de este artículo requieren un clóset; esto ayudará a mantener las cosas en su lugar y a dar una sensación de orden y limpieza. La ergonomía debe ser una prioridad: los especialistas aseguran que garantizar condiciones posturales adecuadas favorece la concentración y mejora el desempeño de cualquier actividad que realicemos.
En este sentido es muy importante escoger los muebles y elementos adecuados para nuestro cuerpo: sillas ergonómicas, sofás cómodos, mesas ajustables para cuarto de estudio u oficina, mats de yoga, pufs, etc., si adecuaremos el espacio para entrenar nuestro cuerpo y mente. Esto nos ayudará a prevenir dolores de cadera o espalda, y síndrome del túnel carpiano, entre otras lesiones.
4. Decora a tu gusto: las plantas son excelentes opciones porque el verde es un color de nacimiento y crecimiento y, por lo tanto, contribuye a la creatividad y la serenidad. Según un estudio de la Universidad de Texas, tener plantas incrementa el surgimiento de ideas en un 15%.
Ten en cuenta la iluminación: los lugares con suficiente luz son más saludables porque dan la sensación de paz y calma y se ven más espaciosos. Puedes agregar cuadros, parlantes, velas aromáticas o elementos decorativos de escritorio. La idea es mantener una decoración muy simple para no distraer la mente, facilitar la movilidad en el cuarto y tener todas las cosas a la mano.
Además, de esta manera se estimulan todos los sentidos, porque consideras elementos visuales, auditivos y olfativos para asegurar el disfrute de todo tipo de personas.
Para organizar el estudio se necesita disposición y tiempo, tener claro qué queremos hacer con ese cuarto, limpiar y sacar lo que no necesitamos, organizar los elementos que mantenemos y los nuevos que incluimos, seleccionar el mobiliario adecuado y personalizar el espacio.
No uses el estudio como un depósito. Si tienes cosas que necesitas guardar y no les consigues un espacio en la casa, aprovecha al máximo una minibodega.